¿Se puede ser más absurdo? No, no se puede.
Como narices muchos señores se pueden gastar burradas en cosas así y que no les cueste soltar la cartera, pero después, a la hora de echar una mano a una buena causa, HUMANA DE VERDAD, tengan tantos reparos (?)
¿Alguien me puede explicar porque puñetera razón se les paga a unos tíos tales cantidades de dinero por ir a entrenar un par de horas a la semana y jugar 4 o 6 partidos al mes?
¿Cómo es posible que un joven en cuanto estira el brazo y apaga el despertador, con ese sencillo movimiento ha ganado, ya por la mañana millones? Sí, alguien lo sabe y me puede responder, lo invito a que me envíe un correo a la dirección del Blog (Parte superior derecha).
El pasado mes de mayo se habló que sí el dueño del Chelsea inglés, Roman Abramovich, estaba dispuesto a abrir la chequera para contratar a Josep Guardiola, y para tratar de convencerlo haría un esfuerzo para fichar también a Lionel Messi, cuyo valor ronda los 250 millones de euros...
¿250 millones? ¿Este hombre no tiene mejores cosas en las que emplear ese dinero?
Y este es un ejemplo de las idas y venidas de nombres (cifras, en realidad) durante este mercado veraniego.
Pero no solo en el fútbol europeo sucede tal cosa. En la NBA más de lo mismo.
Estos últimos días, solo se habla de lo que aquí nuestro amigo Prokhorov (Mikha) está dispuesto a 'ofrecer' para hacer de sus Nets un Chelsea pero a lo NBA xDD... Sí, lo sabemos, la idiotez o la crisis de los cuarenta les da por ahí, en tirar su dinero en naderías tan tontas como estas.
Y vale, entiendo perfectamente que cada uno hace con su fortuna lo que quiera, pero es triste ver malgastar millonadas en memeces así, cuando en el mundo hay tanta necesidad. Sobre todo, es penoso comprobar como a estos señores no les tiembla el pulso a la hora de tirar de chequera para enriquecer (y más que enriquecidos) a unos deportistas que la mayoría de las veces, son más los días al año que se tocan las pelotas, que los que curran de verdad.
¿Para cuando esas cantidades desorbitadas en obras de caridad, por ejemplo? Hospitales, escuelas, refugios... ¿Saben estos señores lo que son estas cosas?
Vaya, mucha fortuna pero también mucha moralidad y ética podridas.
Pues nada, espero que a esos a los que compráis por tanto dinero, os laman MUY bien vuestros traseros de riquillos reprimidos... ¡Ups!